Refrigeración
De mantener la frialdad cuando las cosas se ponen calientes, se encargan un par de radiadores montados muy cerca del centro de gravedad. Utilizando la tecnología CFD (Dinámica Computacional de Fluidos) y un ingenioso recorrido del circuito refrigerante, logran mantener la temperatura óptima del motor para obtener el máximo rendimiento, sean cuales sean las condiciones. Además, el distribuidor delta, integrado en el triángulo del chasis, cuenta con un gran tubo central que permite un eficaz flujo de refrigerante. Los radiadores también se benefician de unos protectores de plástico que les mantienen a salvo de las piedras y otros objetos volantes, y que sirven también de estructura para dispersar la energía alrededor de los radiadores en el caso de impacto.